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Errores comunes al mantener un blog corporativo y cómo evitarlos desde el primer mes

Actualizado: 3 jun

Publicar no basta: necesitas estrategia, estructura y métricas si quieres resultados reales

Persona de espaldas sujetándose la cabeza frente a un fondo ardiente de colores rojo y amarillo, representando la frustración y el caos por errores en la gestión de un blog corporativo.
La falta de estrategia, planificación y análisis convierte un canal de alto valor en una carga sin sentido. En este artículo, te ayudamos a evitar los errores que llevan a esa sensación… y a recuperar el control de tu blog corporativo.

El 80 % de los blogs corporativos mueren en menos de un año.

No es que no tuvieran potencial. No es que el contenido fuera malo.


Publican con ilusión el primer mes… y desaparecen en el segundo.

Creen que con tres artículos bien escritos empezarán a posicionar, atraer visitas y generar ventas. Pero el blog no es magia. Es método.


En un ecosistema digital cada vez más competitivo, mantener un blog activo y relevante no es una cuestión de inspiración, sino de constancia, planificación y análisis.

Un blog corporativo puede ser uno de los activos más valiosos de una marca… o un desierto virtual que nadie visita.


En este artículo vamos a analizar los errores más comunes que cometen las empresas al gestionar su blog, y lo más importante: cómo evitarlos.




1. Publicar sin estrategia


Uno de los errores más comunes —y más costosos— en los blogs corporativos es comenzar a publicar sin un plan claro.

La escena se repite en muchas empresas: alguien propone “empezar a mover el blog”, se escribe un primer artículo con entusiasmo, luego otro cuando hay tiempo... y poco a poco el blog queda en pausa, como una sala de espera digital sin rumbo ni propósito.


El problema no es solo la falta de contenido, sino la ausencia total de intención.


¿Para qué existe el blog?¿Está orientado a captar leads, educar a los clientes, mejorar el posicionamiento en Google, o fortalecer la marca?

Sin objetivos definidos, el blog se convierte en un contenedor de ideas sueltas, desordenadas y sin valor estratégico.Y lo peor: sin saber qué medir, tampoco se sabe si está funcionando.



¿Cómo evitarlo?


La clave está en crear un calendario editorial alineado con los objetivos reales del negocio. Eso significa planificar no solo cuándo se publica, sino también qué se publica, por qué y para quién.


Te recomendamos leer Cómo crear un calendario editorial para tu blog para diseñar una estructura de contenidos clara, sostenible y 100 % enfocada en resultados.




2. No investigar palabras clave ni intención de búsqueda


Muchos blogs corporativos fracasan por un error tan común como silencioso: escribir lo que a uno le parece interesante, sin comprobar si realmente hay alguien buscándolo.

Publican artículos con títulos como “Reflexiones sobre el cambio digital” o “Una mirada al futuro de las organizaciones”. Suenan bien, suenan “profesionales”… pero nadie los busca. Nadie los encuentra.


El contenido sin intención de búsqueda es como hablar en un auditorio vacío.

En el entorno digital actual, escribir sin validar primero las palabras clave es una pérdida de tiempo y recursos.Cada artículo debería responder a una necesidad, pregunta o búsqueda real del usuario. Y eso se identifica antes de escribir, no después.



¿Cómo evitarlo?


Antes de decidir qué tema publicar, dedica 15 minutos a validar:


  • ¿Se busca esto en Google?

  • ¿Cómo lo formulan las personas?

  • ¿Cuál es la intención detrás: informarse, comparar, comprar?


Existen herramientas gratuitas y muy intuitivas que puedes usar para comenzar:



Al investigar previamente las palabras clave y entender qué quiere encontrar el usuario, pasas de escribir por intuición a escribir con precisión.


Este enfoque será parte esencial una parte esencial de nuestra estrategia: La diferencia entre escribir contenido para usuarios y contenido para Google



3. Contenido sin estructura ni escaneabilidad


Aunque el contenido sea valioso, si no se puede leer fácilmente, no servirá de nada.

Uno de los errores más frecuentes en blogs corporativos es publicar artículos como si fueran ensayos: párrafos largos, sin subtítulos, sin énfasis visual, sin aire. Todo junto, todo igual. Sin jerarquía. Sin escaneabilidad.


En internet, nadie “lee” al principio. Todos escanean. Y si no encuentran algo que les llame la atención en segundos, se van.

Además, muchas empresas olvidan la importancia de una estructura SEO correcta:no utilizan H1, H2, H3 de forma coherente, repiten títulos o abusan de negritas sin sentido.

Este tipo de errores no solo afectan al lector, también dificultan la interpretación del contenido por parte de Google.



¿Cómo evitarlo?


La solución es aplicar estructuras claras y previsibles como:


  • Guías paso a paso

  • Listas con bullet points

  • Checklists

  • Preguntas frecuentes (FAQ)

  • Secciones con subtítulos lógicos y jerarquizados


Esto mejora la experiencia del lector, aumenta el tiempo en página y la retención, y ayuda a Google a entender la relevancia de cada bloque de contenido.


Aquí tienes recurso práctico donde explicamos todo esto en detalle: Cómo estructurar un artículo SEO sin ser redactor profesional


Gráfico de Google Search Console que muestra el rendimiento de un sitio web durante tres meses, con caída progresiva en clics e impresiones debido a la falta de publicación constante.
Ejemplo real de caída de rendimiento en un blog no actualizado. Gráfico extraído de Google Search Console que muestra cómo bajan las impresiones y clics cuando se interrumpe la publicación constante de contenido.

4. No medir resultados (ni aprender de ellos)


Otro error común —y peligroso— es publicar artículos y cruzar los dedos esperando que “pase algo”.

Se lanza el contenido, se comparte en redes… y ahí se queda. Sin revisión. Sin seguimiento. Sin análisis.Así no funciona el SEO. Así no crece un blog.


Un blog sin métricas es como un negocio que no revisa sus ventas ni escucha a sus clientes.

Muchos equipos ni siquiera tienen configuradas herramientas esenciales como Google Analytics o Search Console.Y si las tienen, no saben cómo interpretarlas ni qué hacer con los datos.


El resultado: se sigue publicando contenido sin saber si está funcionando, para quién, ni por qué.



¿Cómo evitarlo?


Para que el blog sea una herramienta de crecimiento y no una caja negra, hay que medir con criterio y aprender en el proceso.

No necesitas ser analista de datos. Solo debes observar cuatro métricas clave cada mes:


  • Clics orgánicos (desde Google)

  • Impresiones (cuántas veces apareces en resultados)

  • CTR (porcentaje de clics respecto a impresiones)

  • Tiempo en página (indicador de calidad del contenido)


Revisar estos datos te permite ajustar títulos, mejorar contenidos y reforzar lo que ya funciona.




5. Abandonar el blog tras la primera caída


Este es uno de los errores más tristes —y más frecuentes— en la vida de un blog corporativo. Se publica con ilusión los primeros tres o cuatro artículos, se comparten en redes, se revisa Google Analytics con nerviosismo… y al no ver resultados inmediatos, se asume que “el blog no funciona”.


Y así, se abandona sin entender cómo funciona realmente el SEO.


El blog no falla. Lo que falla es la paciencia.Porque el SEO no es una carrera de velocidad, es un maratón de estrategia y constancia.

Muchos no comprenden el efecto compuesto del contenido: cada nuevo artículo no solo aporta por sí mismo, sino que refuerza a los anteriores, multiplica la autoridad temática y mejora el rastreo del sitio. Pero ese efecto sólo aparece cuando hay continuidad.



¿Cómo evitarlo?


Hay que cambiar la mentalidad.


Un blog no es una campaña. Es un activo digital a medio-largo plazo. Debe tratarse como se trata a una inversión: con seguimiento, planificación y puntos de control trimestrales.

Si después de tres meses no ves resultados, no significa que estés fracasando.Significa que estás construyendo base. Que estás entrando en juego.


Si no sabes cuánto contenido necesitas ni cada cuánto publicarlo, este artículo te lo explica:¿Cada cuánto debo publicar en mi blog?



Conclusión: el blog como voz estratégica de tu marca


Mantener un blog corporativo no es solo cuestión de escribir bien. Es cuestión de estrategia. A lo largo de este artículo hemos visto los errores más comunes que suelen frenar o enterrar por completo el potencial de un blog:


  • Publicar sin una planificación real ni objetivos claros

  • Escribir sin validar palabras clave ni intención de búsqueda

  • Descuidar la estructura, la legibilidad y el formato SEO

  • No medir los resultados ni aprender de lo que funciona

  • Abandonar el blog antes de tiempo, sin comprender el efecto compuesto del contenido


Evitar estos errores no solo mejora tu SEO, también transforma tu blog en una herramienta real de posicionamiento, captación y autoridad digital.


El blog no es un espacio más en tu web. Es la voz estratégica de tu marca en el tiempo.

Y recuerda: “Si sabes qué errores evitar, ya tienes media estrategia ganada.”



¿Tu blog está estancado o no está generando los resultados esperados?


En Sphere Studio auditamos tu estrategia de contenidos, detectamos los puntos de mejora y te ayudamos a relanzar tu blog con foco, técnica y visión de crecimiento sostenible.


Solicita una revisión profesional de tu blog y empieza a trabajar con datos reales.

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